globos   ¿Cuántas emociones reprimimos a lo largo de un día? ¿Qué sentimientos has sentido y no has dicho en el día de hoy? Desde pequeños nos enseñan a tapar, esconder, bloquear y minimizar nuestras emociones. Vamos siendo castrados en nuestros sentimientos y emociones, y cuando podemos tomar nuestras propias decisiones ya en la etapa adulta mantenemos bien guardados. Nuestra rabia, nuestra ira, la tristeza, etc; así como las expresiones positivas: los abrazos o decir “cuánto te quiero” no son expresados por una vergüenza y un miedo antiguos, de la infancia. “No llores, mujer”, “Ahora te vas a enfadar?”, “No estés triste que te pones feo/fea” y un largo etc. de frases han ido calando en nosotros. La mayor parte del tiempo esto nos hace guardarnos las emociones como si fueran algo de lo que avergonzarse, sin tener en cuenta una cosa: podemos escondernos del mundo, pero tu cuerpo siente y reacciona tanto a la alegría como al dolor que sientes. Si continúas con esa relación que en verdad ya no te encaja, con una sexualidad que no te hace disfrutar, con esa rutina que te proporciona estrés y te quita la alegría, con esas amistades que no te hacen sentir bien… Tu cuerpo sentirá estas emociones, cada una de ellas, y cuando no somos conscientes de ellas, cuando no las gestionamos o no las expresamos, el cuerpo las almacena. A largo plazo, ésto nos puede provocar mucho malestar, y de ahí pueden aparecer problemas como la ansiedad, la depresión, dificultades en la sexualidad, fobias, insomnio, estrés, insatisfacción, entre muchos otros.  

Cuanto más tiempo se sufre en silencio, más enfermo se está.

Paulo Roberto Gaefke

¿QUÉ HAY ENTRE LA NECESIDAD DE EXPRESIÓN Y EL SILENCIO?

Se nombra al silencio como un rasgo de sabiduría, y siempre es bueno pensar antes de hablar. Intentaremos evitar comentarios fuera de lugar o expresiones de nuestros sentimientos en caliente, pero es importante encontrar el equilibrio entre el silencio y la defensa de nuestras necesidades emocionales.

Así que para cerrar este post, pensamos que es buena idea compartir con vosotros algunos consejos para manejar mejor nuestras emociones, y así poder ser más auténticos con nosotros mismos. Ahí van:

  • Es muy importante tener consciencia de lo que dices, pero sobretodo de lo que sientes y piensas. En resumen, ser lo más honesto que puedas contigo mismo, escuchar tus necesidades.
  • Ten presente que decir lo que piensas no es hacer daño a alguien. A veces es necesario poner límites, informar a la otra persona de tu realidad.
  • Intenta no hacerte cargo de lo de los demás. Hay una diferencia entre la empatía y el hacernos cargo de las emociones y los sentimientos del otro. Ello te puede llevar más carga de la cuenta, además de la tuya sumar la del otro.
  • Escribe como medio del autoconocimiento. Escribir lo que piensas y sientes te puede ayudar a ser coherente con lo que sientes y conseguir así estructurarlo, para encontrar aquello que necesitamos decir o hacer.
  • Escucha tus emociones a través del cuerpo. Nuestro cuerpo nos da mucha información, pero no siempre estamos atentos en el día a día. Nuestras tensiones, molestias físicas y a veces nuestras enfermedades, también hablan de nuestra vida emocional.